El Ecuador requiere mejorar la gestión de nuestros recursos hidráulicos, hoy es evidente que la presa Daule Peripa es una obra que por sí sola es insuficiente ante estos fenómenos climatológicos como son las lluvias torrenciales de “El Nino” para evitar inundaciones en cantones, recintos y parroquias localizados en la cuenca baja del Guayas.
Ecuador es un país rico en recursos hídricos gracias a su geografía diversa y compleja. El país cuenta con más de 60 cuencas hidrográficas y abarcan desde la Cordillera de los Andes hasta la costa y la selva amazónica. La gran mayoría desaprovechadas por aquellos que desconocen la real importancia del agua.
Una de las soluciones para abordar este desafío es interconectar las cuencas hidrográficas, lo que permitiría una gestión más eficiente de los recursos hídricos y una mejor adaptación al cambio climático. La interconexión de las cuencas hidrográficas implica la transferencia de agua de una cuenca a otra a través de canales, túneles, presas y otros sistemas de transporte de agua. Esta práctica se ha utilizado en otros países de América Latina, como Brasil y Colombia, con resultados exitosos.
La interconexión de las cuencas hidrográficas en el Ecuador tendría varios beneficios potenciales. En primer lugar, puede mejorar la disponibilidad de agua para el consumo humano, la agricultura y la generación de energía hidroeléctrica. En segundo lugar, puede reducir la vulnerabilidad a la escasez de agua y las sequías, ya que la interconexión permite el intercambio de agua entre cuencas durante períodos de sequías. En tercer lugar, puede ayudar a prevenir inundaciones al permitir el desvío de agua de las cuencas más grandes a las más pequeñas y hacia el mar si fuese necesario.
Sin embargo, la interconexión de cuencas hidrográficas también tiene sus retos y riesgos potenciales, para abordar estos desafíos y maximizar los beneficios de la interconexión de cuencas hidrográficas, es importante que el gobierno ecuatoriano establezca un marco regulatorio claro y una política nacional de gestión integrada incluyendo la participación de todas las partes interesadas, desde los usuarios de agua hasta las comunidades locales y los grupos ambientalistas porque la construcción de infraestructuras para la interconexión puede tener un impacto ambiental negativo, como la fragmentación de ecosistemas y la alteración de las características hidrológicas de las cuencas.
Ing. Pedro Alava Gonzalez. M.Sc.